Los problemas de erección son uno de los problemas sexuales más frecuentes en la actualidad. No obstante, las estadísticas también indican que debemos mantener la calma, pues se estima que, según algunas estadísticas, en 9 de cada 10 casos la solución puede ser bastante efectiva.
Pero para poder valorar la importancia real de este tipo de problemas, primero debemos averiguar cuáles son sus verdaderas causas.
Dificultades con la erección: ¿a qué se deben estos problemas sexuales?
Los problemas de erección tienen principalmente dos orígenes. Por un lado, están los problemas orgánicos, tales como la diabetes, el colesterol alto o lesiones de diversa índole, en cuyo caso debes ponerte en contacto con un médico especialista que pueda ayudarte de la forma más conveniente. Sin embargo, la mayor parte de las veces encontramos su origen en problemas de carácter psicológico, principalmente la ansiedad y el estrés.
Problemas sexuales psicológicos: ¿cómo superarlos?
Lo primero que debes hacer es comprender lo que está sucediendo. Es importante que aprendas a rebajar la ansiedad, que está estrechamente relacionada con el miedo a fallar, aceptando que todo esto puede llegar a ocurrir.
Para ello, resulta fundamental evitar prestarle demasiada atención al problema, independientemente de que puedas o no realizar finalmente la penetración, e intentar enfocarte en el lado placentero de la relación. En otras palabras, debes intentar rebajar la presión. En cuanto lo consigas, volverás a recuperar la confianza en ti mismo. Y para ello, siempre puedes recurrir a la ayuda de un psicólogo.
Ya sea para las dificultades con la erección o para otros problemas como la eyaculación precoz, es mucho lo que un psicoterapeuta puede hacer por ti. Un psicólogo especialista puede enseñarte a dejar de lado tus preocupaciones, para que aprendas a relajarte de nuevo y puedas volver a disfrutar de tus relaciones sexuales, haciendo que los problemas sexuales formen parte del pasado.